Estamos pasando un rato muy agradable, se sirven las bebidas. En vasos de cristal para los adultos y en vasos de plástico para los pequeños. También se sirve pastel... ¡Cuán rico y cuánto mejor si se comparte con los amigos!
Pero las manitas aquí y allá, tratando de abarcarlo todo y no perder oportunidad, hacen tambalear, sin siquiera darse cuenta, el vasito rosa de plástico. Y sí, se derrama el precioso líquido sobre la mesa, el suelo, etc.
Son las exclamaciones de los adultos que hacen que la pequeña se percate de lo ocurrido y su rápida reacción es un "perdón" repetidas veces hasta que su mamá le asegura que todo está bien.
Perdón.
Vale solo tiene 3 años.
Grande fue mi sorpresa. Una niña de tres años que pide perdón por derramar un vasito de agua. Si por una cosita insignificante se pide perdón, me pregunto cual entonces debería ser la reacción para las cosas más significativas. ¡Cuánta más paz habría en este mundo si "simplemente" fuésemos capaces de usar la palabra "perdón" algo más a menudo.
Conmovedor...
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